En este artículo hablaremos del juego mixto en el pádel.
Primero vamos a definir lo que es un mixto. Cuando hablamos de un partido mixto en el pádel, nos estamos refiriendo a un partido de dobles, donde en cada una de las parejas hay un hombre y una mujer.
Un partido de estas características es muy atractivo, en el sentido de que los puntos son muy largos.
Habitualmente, las mujeres no basan su juego en la fuerza, sino más bien en la técnica; su juego consistirá en pasar bolas una gran cantidad de veces. Por el contrario, los hombres tienden más a rematar e intentar terminar el punto.
Es casi imprescindible probar esta disciplina, y combinarla con partidos sólo masculinos o femeninos. Las razones son varias.
- Diversión asegurada.
- Fortificar el compañerismo. Si cuando juegas un masculino crees que tu compañero tiene la suficiente fuerza como para llegar a las bolas, en esta ocasión, con un mixto, tienes que ayudar más y puede que llegar a esas bolas que ellas no pueden. Sin duda ese fortalecimiento de la pareja te ayudará a entender hasta donde llega tu compeñero y cuando debes tú actuar.
Jugando a este modo de juego empezarás a perder la costumbre de matar el partido a las primeras de cambio y tu técnica mejorará bastante. El partido durará más tiempo y será más instructivo para ti.